sábado, 4 de julio de 2015

Manic Miner (ZX Spectrum)

Manic Miner es un juego programado por Matthew Smith y publicado y distribuido por Bug-Byte para ZX Spectrum en 1983 en exclusiva para Europa, siendo posteriormente a multitud de sistemas como Amiga, PC, MSX, Amstrad CPC, Commodore 64 o Game Boy Advance, pero yo me voy a centrar en esta versión original para Spectrum, que es la única que conozco. Se trata de un arcade de tintes plataformeros de mucha calidad y terriblemente divertido.





En el juego interpretamos a un minero que debe atravesar varios túneles y estancias de una mina, teniendo que recoger en cada nivel una serie de objetos que necesitamos para poder alcanzar la salida del nivel que nos llevará además al siguiente, debiendo hacer esto antes de que se nos acabe el oxígeno. Pero no será una fácil tarea, porque en cada nivel nos vamos a encontrar con diferentes tipos de enemigos a los que debemos evitar, igual que las múltiples trampas que nos vamos a encontrar a lo largo del camino. Tanto los enemigos como las trampas nos provocan la muerte instantánea si las tocamos. También podemos perder una vida si caemos desde una altura demasiado alta.



El apartado técnico está muy bien. Gráficamente resulta muy sencillo, pero no hay queja al tratarse de un juego de 1983, y más al tratarse de un juego de este tipo, pero lo que sorprende es el colorido que presenta cada una de las pantallas para un ordenador como Spectrum que precisamente no tenía una paleta muy amplia. Además durante todo el juego suena la melodía "En el Salón del Rey de la Montaña" de la suite Peer Gynt de Grieg, sonando en el menú "El Bello Danubio Azul" de Johann Strauss II, que no suenan con muy buena calidad de audio, pero está bien para el año que salió y además es el primer juego de Spectrum que presenta música durante el desarrollo de los niveles.



Pasando al tema de la jugabilidad, tiene el juego una mecánica muy arcade comparable a otros juegos de la época y de un estilo similar, siendo ya de por sí un título muy divertido y adictivo, y se potencia esta sensación gracias al control tan sencillo y cómodo que tenemos sobre el protagonista, lo que permite manejarle con total facilidad y comodidad a la vez que responde de maravilla al teclado. El juego como es lógico en el género cuenta con una alto número de niveles y de una dificultad progresiva, haciéndose cada vez más complicado.



Resumiendo, una arcade plataformero para Spectrum que resulta muy divertido y adictivo, y además fue un éxito en su momento. Muy recomendable.

2 comentarios:

  1. Pesadilla, pesadillas me produce este juego! ¿Dificil Dark Souls? Esto si que es dificultad.

    Maldita planta, que pensé que era escenario y me mato....

    Bromas aparte, es un juegazo. Abuelo de muchos plataformas posteriores.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La primera vez que jugué yo también pensaba que las plantas formaban parte del escenario, o que eran alguna especie de item xdddd

      Eliminar